Esta exposición responde a la convocatoria de la tercera edición del Festival Internacional de Fotografía FotoMéxico2019, cuya línea argumental busca visibilizar la producción fotográfica de mujeres, al exponer ensayos o tomas aisladas donde se propongan argumentos de fondo sobre cómo representar el entorno, la identidad e incidencia política de su circunstancia inmediata, y la diversidad de consideraciones sobre el cuerpo femenino.

Desde su invención, la práctica fotográfica ha contado con la presencia activa y creativa de las mujeres, ya fuese preparando el material del laboratorio donde experimentaban con la técnica o como figuras participativas en el estudio de consagrados fotógrafos, contribuyendo con argumentos teóricos. Desde entonces, la aprehensión femenina de la realidad se ha materializado a través de la lente, y su mirada ha sido clave para la construcción de la historia de la fotografía.

En el caso de México, la diversidad que encontramos entre fotógrafas es especialmente peculiar: sus visiones sobre el contexto y el trabajo fotográfico difieren entre sí, dejando claro que como mujer hay más de una forma de ver y entender el mundo. Entre éstas observamos cómo Vida Yovanovich se adentró en lo poético y lo trágico de lo cotidiano; asimismo resaltan las experiencias de viajeras como Graciela Iturbide y Ursula Bernath, quienes retrataban los pueblos de México y a sus mujeres; o la visión vanguardista de Tina Modotti y Lola Álvarez Bravo, cuyas imágenes contribuyeron a la construcción de la fotografía moderna, al dejar atrás prácticas como el pictorialismo.

Con el tiempo, su obra y dedicación les ganó el reconocimiento mundial como autoras consagradas y ejecutoras representativas de la disciplina. Sin embargo, la lucha para visibilizar y dignificar su labor no ha sido fácil. Por eso es de especial importancia resaltar los momentos cuando estas mujeres se han unido para apoyarse y dar voz a sus narrativas, como Bernice Kolko y sus retratadas en el proyecto Mujeres de México; Maya Goded con su trabajo con madres y prostitutas, o bien la amistad y colaboración entre Ruth Lechuga y Gertrude Duby, por nombrar algunas de las 33 artistas aquí reunidas. Hoy nos toca reflexionar sobre su contribución expresiva y redescubrirlas como vanguardistas, fotorreporteras y autoras de imágenes icónicas.

De esta manera, a partir de la muestra Confines, confluencias y conformidades invitamos al público a familiarizarse con la práctica fotográfica desde la lente femenina y dilucidar sus posibles mensajes. Se propone que las fotografías estén dispuestas en binomios asociados para evidenciar sus características formales, cotejando contrastes, texturas, encuadres y movimientos.

La relación propuesta entre las imágenes sirve como invitación para que el espectador vea más de cerca estas fotografías y arribe a nuevas conclusiones sobre las construcciones simbólicas que conforman cada imagen y cómo se entrelazan y apoyan entre sí, dejando al descubierto el acercamiento honesto de estas autoras al México de su tiempo, con las complejidades que esto implica.